Antes de su partida hacia Turquía, el papa Francisco protagonizó un blooper mientras subía al avión que lo trasladaría a ese país.

Al subir las escalerillas de la aeronave, el papa se tropezó, pero logró agarrarse de la baranda con la mano derecha. En su mano izquierda llevaba su clásico portafolio negro.

El sumo pontífice partió hacia Turquía a las 9 hora local (5 hora de Argentina).

El viaje se produce solo tres días después del que le llevó hasta Estrasburgo (Francia), para dirigirse a los miembros del Parlamento Europeo y del Consejo de Europa, una situación insólita que le convierte en el primer pontífice en realizar dos viajes internacionales en un período tan breve. (El Intransigente)