Esta vez, la novedad proviene del maravilloso mundo de los vinos, que ahora ofrece una bebida de color azul, creada por los jóvenes españoles Taig Mac Cathy y Aritz López a través de la marca Gik.

Su proyecto empezó a través del programa de emprendedores de la Universidad del País Vasco, que les facilitó los medios para llevar a cabo su "locura vanguardista", como la definen.

Según publicaron sus creadores, se trata de una bebida dulce y suave que está pensada para servirse fría.

Su particular color se obtiene de una combinación de antocianina (un pigmento que se encuentra en la piel de uva) y el índigo (un colorante extraído de la planta tinctoria Isatis), y un edulcorante no calórico. "Su sabor es muy similar a un vino blanco dulce".

Hoy se puede encontrar en China y hasta en una estación de esquí en Suiza, donde lo venden caliente con un poco de canela. También los hay en 300 bares de toda España y en su página web a 10 euros la botella.

Este vino, tiene 11,5 grados de alcohol y sale de las bodegas del Bierzo (León). Su color cada vez atrae a más clientes.