Hace tiempo se anunció que el Municipio, a través de un convenio con el Ministerio de Justicia había adquirido diez rastreadores satelitales para entregar a víctimas de la violencia de género. La jueza determinaría a quién entregárselos, de acuerdo a cada caso particular, y el monitoreo se iba a realizar desde el Municipio. Cada vez que el rastreador da una señal de alerta, el Centro de Monitoreo municipal da aviso a la policía.

Pero hasta ahora, esta herramienta tan importante para muchas mujeres víctimas de la violencia de sus parejas no pudo implementarse. La jueza Silvia Monserrat, titular del Juzgado de Familia de nuestra ciudad, es quien tiene que asignarlos y hacer la entrega formal, pero está de licencia por un viaje en el exterior.

La jueza Monserrat, polémica en la ciudad por su cuestionado accionar en varias causas delicadas, y por las denuncias en su contra por maltrato por parte de sus propios empleados, viajó al exterior hace tiempo y para ello solicitó licencia. Hasta que no regrese, los rastreadores no podrán entregarse a las mujeres que corresponde.

Desde el Municipio indicaron que todo el sistema operativo está listo para funcionar, pero que sólo resta que los rastreadores estén en manos de las personas que lo necesitan.