En el año 2013, organizaciones populares, sociales, comunitarias, y políticas, junto a ciudadanos de nuestra ciudad, nos constituimos como Asamblea de Tierra y Vivienda (ATyV). Como espacio, nos hemos dado estrategias para acompañar situaciones por las que atraviesan grupos familiares de nuestra ciudad en situación de vulnerabilidad habitacional, sea durante el periodo de posesión de hecho de un inmueble urbano (para lo cual se hace necesario evidenciar que se ha tratado de casas sin terminar de construir y sin servicios urbanos conectados, lo que define un escenario de riesgo y vulnerabilidad para esas familias), como durante los momentos de desalojos y posteriores reubicaciones de los “desalojados”.

Lo hemos hecho porque somos conscientes de que el problema de fondo es el tipo de desarrollo actual de la ciudad, y no representan problemas individuales o aislados. Paralelamente hemos favorecido las instancias de diálogo entre distintos actores sociales de la sociedad civil, del ámbito judicial y asistencial, del gobierno local y provincial, con el interés de arribar a soluciones en relación al acceso a la vivienda de estos sectores. Hemos realizado talleres de formación, festivales, charlas. Asimismo hemos gestionado recursos asistenciales y elaborado materiales de discusión y estudio, así como propuestas en relación a la restitución de derechos y específicamente del derecho al hábitat como acceso justo a la tierra, la vivienda y la ciudad.

En el marco de estas discusiones, venimos promoviendo el Foro por el Acceso Justo al Hábitat (un instrumento que prevé la Ley Provincial nº 14.449/12.).

Quienes formamos parte de la ATyV; entendemos que el desarrollo actual, fuertemente asentado en el negocio inmobiliario, pone en tela de juicio el acceso de todos los sectores sociales a los inmuebles urbanos, y de esa manera el Derecho a la Ciudad. Un punto fundamental de esta problemática es la producción y el acceso al suelo urbano para la construcción de viviendas.

Al respecto consideramos altamente desalentador la votación, en el recinto del Honorable Concejo Deliberante, por parte de los concejales del bloque de la UCR, por la cual el día 11 de septiembre se transfirieron 5.515.515 de pesos que provenían de la venta de terrenos y que según Ordenanza 8311/01 hubiesen constituido ingresos del Fondo Especial de Expropiaciones. Este fondo estaría destinado a la compra de inmuebles por razones de interés público, integrado por ingresos provenientes de la venta de inmuebles de propiedad municipal. En tal sentido, dicho monto que debería haber sido destinado para la ampliación de suelo urbano, con el objetivo de ponerse a disposición de iniciativas en materia habitacional para los sectores de menores ingresos de nuestra ciudad, según consta el espíritu del Plan de Desarrollo Territorial de Tandil, se desvió finalmente hacia Vialidad.

Repudiamos tal decisión, y ponemos en evidencia la falta de prioridad, que para el actual gobierno local, tiene la problemática central del acceso a la tierra, la vivienda y a la ciudad, en igualdad de posibilidades para todos los sectores sociales.

Asamblea por Tierra y Vivienda Tandil