Específicamente en los controles, que contaron nuevamente con el apoyo de efectivos policiales, se retuvieron cuatro motocicletas y veintitrés automóviles. Entre esos vehículos se detectaron tres taxis y un remís que se encontraban prestando servicios al momento de ser sancionados.

Además, desde el área comunal informaron que se labraron infracciones por ocho casos de alcoholemia positiva, en conductores a los que se les detectó una graduación de alcohol en sangre superior a la permitida por la legislación.

Además de esta transgresión a las leyes, diecinueve personas fueron sancionadas por circular sin la licencia de conducir, diecisiete por no poseer seguro, veintisiete por no contar con la verificación técnica vehicular al día y nueve por circular sin casco.

Todas estas irregularidades derivaron en la confección de ciento veintiún actas de infracción por ciento sesenta faltas. En todos los casos se iniciaron las actuaciones correspondientes y se elevaron a la justicia de faltas local.

Con los operativos continuos el Municipio busca reducir al mínimo la cantidad de conductores de motocicletas y vehículos que no utilizan las medidas de seguridad y garantizar el cumplimiento de las normas municipales y provinciales vigentes y de esta manera reforzar la seguridad al transitar en la vía pública.

El director de Control Urbano Vehicular, Walter Villarruel, agradeció al personal policial que brinda su apoyo en los operativos y reiteró el llamado a los vecinos a respetar las normas “y entender los riesgos que nos provocamos a nosotros mismos y a los demás, al conducir de manera imprudente o luego de ingerir alcohol”.