La Justicia le encontró a Lázaro Báez decenas de autos lujosos, chacras impecables pero sin usar, kilómetros y kilómetros de hectáreas desiertas sin una utilización práctica, una mansión con sillones de repuesto, entre otras amenities, y cientos de propiedades que aún se deben analizar financieramente. Pero entre la multiplicidad de objetos hallados también hay extravagancias peronistas como la enorme estatua de Néstor Kirchner que estaba en un depósito y otras tantas: al empresario patagónico le secuestraron varias reliquias dignas de un museo justicialista.

En la "chacra 39", uno de los lugares en donde se hizo un procedimiento por orden del fiscal Guillermo Marijuan, se encontraron diversos elementos de mucho valor: una foto original que Juan Domingo Perón le dedicó a Eva Duarte, cartas originales de Evita y Perón, libros históricos con invalorables primeras ediciones y hasta un ejemplar que el famoso perito Francisco Pascasio Moreno le dedicó a un amigo.

"A la señorita Eva Duarte, con todo mi afecto", dice al pie la fotografía de Perón vestido de militar, fechada el 26 de enero de 1944 y firmada de puño y letra por él mismo. El dato del día es clave para mensurar su valor histórico: la imagen es de cuatro jornadas después de que el expresidente, viudo por esa época, conociera en un acto en el Luna Park a Evita, una joven actriz de 24 años. Un mes después de la conquista, la pareja ya convivía.

También tiene firmados dos ejemplares de mucho valor histórico y monetario. Se trata de La razón de mi vida, el clásico de Evita, rubricado por ella misma y el volumen Del poder al exilio, de Perón, también con su autógrafo.

¿Cuánto pagaría un museo por estos verdaderos tesoros históricos?