No pudo ser para Juan Martín del Potro (24º del ranking) en el ATP 500 de Beijing. Aunque dispuso de buenas oportunidades para dar un paso más, el búlgaro Grigor Dimitrov (8º) jugó mejor los puntos clave y se impuso por un ajustado 7-6 (8-6) y 7-5 en dos horas exactas de partido para instalarse en los cuartos de final. El europeo defiende aquí los 300 puntos que obtuvo un año atrás, cuando llegó a la final y cayó ante el británico Andy Murray. Su próximo rival será el español Roberto Bautista Agut, quien venció 6-0, 4-0 y abandono al británico Aljaz Bedene.

Comenzó mejor el argentino, y quebró el saque del australiano en la tercera oportunidad que tuvo en el game inicial. Y enseguida ganó en cero su primer juego de saque para confirmar el quiebre y ponerse rápidamente 2-0. Tuvo un nuevo break point en el tercer game, pero no pudo aprovecharlo.

Le llevó algo más de dos games a Dimitrov terminar de descifrar el servicio del argentino. Y en la primera oportunidad que tuvo, concretó el quiebre y niveló el marcador: 3-3.

Fueron saque y saque hasta el tie break, pero a Dimitrov le costó mucho cerrar con su servicio el game que, finalmente, le dio ventaja de 6-5 (llegaron a estar 40 iguales). También comenzó con dudas Delpo en el game siguiente. Cometió su segunda doble falta en el primer punto y después quedó 15-30, pero corrigió a tiempo y así llegaron al 6-6.

Delpo consiguió un miniquiebre de entrada, pero una doble falta en el tercer punto ayudó al europeo a quedar 1-2 con su saque. Volvió a tomar ventaja el tandilense con el servicio de Dimitrov (3-1), pero otra vez se le esfumó y el búlgaro llegó a tener ventaja de 5-4. Juan Martín impuso condiciones con su saque y tuvo un break point, pero Dimitrov contestó con la misma moneda y la ventaja quedó de su lado. Entonces Delpo cometió su cuarta doble falta y el set se fue definitivamente.

Se mantuvo la paridad en el segundo set, hasta el sexto game, cuando Del Potro apretó y salió decidido a buscar el quiebre apoyado en un revés fino y agresivo como en los mejores momentos de de su carrera.

Un espectacular passing paralelo, justamente de revés, le dio el break point al tandilense, y el propio Dimitrov selló su suerte en el parcial con un revés que se le fue ancho y lo dejó abajo por 5-2.

Pasó el game de saque de Dimitrov y el argentino tuvo la oportunidad de cerrar el set con su servicio, pero cuatro errores seguidos con la derecha, habitualmente su arma letal, le dieron una oportunidad más a Dimitrov, quien pasó de mostrarse errático y frustrado a conseguir una oportunidad inesperada. Quiebre para 5-4 y sólido game de saque para 5-5.

Siguieron las fallas de la derecha del argentino y las consecuencias fueron cada vez más graves, hasta que llegó un nuevo quiebre del búlgaro para 6-5.

Entonces la frustración se instaló en el cuerpo de Del Potro, que ya no tuvo margen para la reacción y vio escaparse un partido que, en varios momentos, pareció que podía tener un final diferente.