En un partido chato y sin demasiadas emociones, el gol del colombiano Rafael Borré a los 40 minutos del primer tiempo fue la acción que terminó definiendo el juego.

Lejos estuvo de ser un partido para ser recordado con el paso del tiempo, como ha ocurrido en otras ocasiones con los amistosos de verano. Sin demasiado vuelo, River fue superior a Boca desde el comienzo y supo imponer por momentos el ritmo del juego.

De la mano de Pity Martínez, uno de los puntos más altos, el Millonario fue más punzante y también contó con una sólida actuación defensiva, con buenas actuaciones de Saracchi, Montiel y Ponzio.