Consuelo Peppino se transformó en la segunda participante no famosa de la historia del Bailando y con su frescura y su historia de vida arrancó sonrisas y lágrimas de emoción, pero lo mejor es que obtuvo un escandaloso puntaje perfecto.

La mujer, de 65 años, es de Villa María, Córdoba, de chica vivió en el campo y es pensionada. Tiene nueve hermanos, es viuda hace nueve años, tiene tres hijos y ocho nietos.

Su novio, a quien conoció hace seis años, se llama Ramón y tiene 68. No hacen vida en pareja ya que viven separados y solo se ven por las noches. Además, los sábados tienen un plan impostergable: salir a bailar con amigos.

Consuelo, que trabajaba en una peluquería haciendo tintura y lavado de cabeza, protagonizó un momento de profunda emoción cuando recibió el saludo desde Madrid, España, de su hijo Germán, su nuera y tres de sus nietos.

Madre de tres hijos y abuela de ocho nietos, se encontraba desde el sábado pasado en Capital Federal, terminando sus ensayos para debutar en el ritmo cumbia, en el cual lució obteniendo 10 puntos de todos los jurados.