Felipe Pettinato, el hijo de Roberto, quien como queda claro apenas entra en escena, quiere ser Michael Jackson. De ahí, confesó, que se operara 7 veces la nariz. Todo sea por parecerse al astro de la música.

Así que no pasó mucho hasta que Felipe tiró, obvio, un intento de moonwalk, el paso lunar popularizado por Michael desde mediados de los '80. El carnet de indentidad de todo imitador que se precie.

Petti jr. aclaró que la fiebre por Jackson se acrecentó a partir de la muerte del ídolo. Y que todo lo recaudado en cada uno de sus shows va a parar a donaciones...

Además, el vástago, dejó otra confesión: que padece el Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad, que, como su nombre lo indica, produce chicos... inquietos.

Puesto a definir la relación con papá, dijo: "Es buena. Ayer me tiró el tarot", dijo, y se escudó en su trastorno para explicar por qué había faltado al programa la semana pasada. "Iba a venir a la Casa Rosada -en alusión al sketch- pero no llegué porque tengo Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad y me olvidé, se me pasó".

Pettinatto también reveló que, de chico, en el colegió, padeció bullying: "En la escuela pública en la que terminé la primaria todos mis compañeros eran chicos que vivían en una pensión e iban a probarse a River para ser futbolistas, y yo no sé lo que es un penal. Ahí me adapté perfecto… Ellos se adaptaron a mí".