Nacionales
20 de Agosto, 2017
Dos adolescentes muertos y un asesino serial suelto
10:25 | Un desconocido los interceptó cuando iban a pescar.

Luego de una agonía de más de siete meses, el adolescente Agustín Rodríguez de 16 años falleció en un hospital de la ciudad de Bahía Blanca, donde había quedado internado, luego de haber sufrido heridas de gravedad por los golpes recibidos en la cabeza, durante un hecho, nunca esclarecido, ocurrido a la vera de una ruta el último 9 de enero, en cercanías de Benito Juárez.

Su amigo Agustín Bustos, con el que iban en bicicleta a pescar a una laguna de la zona, murió en el acto, también producto de esa agresión, propinada por uno o más todavía desconocidos. Ahora ambos adolescentes están muertos y el o los asesinos, gozan de una perfecta libertad.

Google Master

Esta segunda víctima fatal de aquel episodio que permanece impune reavivó el pedido de justicia ante la falta de respuesta de los investigadores, al margen de ciertas "consecuencias" como el relevo de los entonces jefes policiales, aunque más producto de los incidentes generados por la reacción vecinal ante la comisaría, que por la muerte de los chicos.

Ayer se conoció la noticia del deceso de Rodríguez (16 años), por alguna complicación de su estado de salud que durante todo este tiempo se sostuvo con un diagnóstico de irreversible, alojado en una sala del hospital Penna de Bahía Blanca.

En horas de la madrugada del pasado 9 de enero, Agustín Nicolás Bustos (de 15 años) y Agustín Rodríguez (cumplió los 16 cuando agonizaba) fueron hallados tirados a un costado de la ruta, con golpes en sus cabezas y signos de haber sido agredidos de manera violenta.

Fue camionero quien dio el alerta, pero para cuando los efectivos llegaron al lugar, los chicos estaban inconscientes y uno de ellos sin vida, además de sin rastros sobre los autores de este ataque.

Entonces, frente a la inexistencia de culpables, ni siquiera de sospechosos, hubo una reacción popular y posteriores graves incidentes frente a la comisaría de Benito Juárez.

Desde el gobierno bonaerense solo se desplazó de sus cargos a los titulares de la seccional, remitiéndolos a nuevos destinos, pese a las sospechas de cierto encubrimiento que pesa sobre la Policía de la zona.

La promesa inicial de “llegar hasta las últimas consecuencias” se fue diluyendo entre las irregularidades de la investigación, a cargo de la fiscal Margaratic, más una instrucción llevada adelante por efectivos de Benito Juárez, inicialmente muy cuestionados por los familiares de las víctimas. Con el asesoramiento legal del abogado Maximiliano Orsini se ha logrado la representación de un perito de parte (ante la imposibilidad económica de poder afrontar sus honorarios, un grupo de los concejales del distrito han colaborado), como así también apartar a la Policía bonaerense, por las sospechas de encubrimiento, de las tareas, que ahora están a cargo de expertos de Gendarmería Nacional.

Desde aquella jornada del ataque a los chicos que iban de madrugada y en bicicleta para ir a pescar a una laguna, las hipótesis abonan el “homicidio”, pero los posteriores procedimientos, con allanamientos y secuestro de presuntas pruebas, no han logrado avanzar en el sentido del esclarecimiento. 

DEJANOS TUS COMENTARIOS