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El cuerpo de Lorenzo Muñoz fue encontrado por los investigadores en un refugio cercano a la localidad de Las Ovejas. Tenía un corte profundo en el cuello, un arma al lado y un estado de descomposición avanzado. Los policías lo buscaban desde hacía 23 días por un doble asesinato en Neuquén.
El Cuerpo Médico Forense le realizará en las próximas horas la autopsia al cuerpo para determinar si Muñoz se suicidó, según publicó La Mañana de Neuquén. El cadáver apareció en un chenque cercano a la casa de uno de sus cuñados.
"Cortaron todo. No vayas a lo de tu hermana. Quedate en chenque". Ese mensaje, escrito en papel y puesto debajo de una piedra, estaba dirigido al hombre, de 41 años, acusado de matar a su expareja y la hija de ella. Así, los investigadores descubrieron que era ayudado por algunos de sus 19 hermanos o cuñados para seguir prófugo.
El 22 de febrero en Las Ovejas, Muñoz sorprendió a Carina Apablaza, de 31 años, y a su hija Valentina López Apablaza, de 11 años, en la calle. A la nena le dio 20 puñaladas y a la mamá, cuando intentó defenderla, seis. Tras el doble femicidio se dio a la fuga.
Durante la búsqueda, los investigadores detuvieron a dos de sus cuñados, Onofre Merino y Luis Enrique Fuentes, por colaborar con Muñoz en su paso a la clandestinidad. Él les hizo caso: se quedó en chenque, un refugio, pero sabiéndose cercado por los policías, se habría quitado la vida.