El número de visitantes superó lo pensado: cien personas arribaron al pueblo, buscando conocer la Historia del lugar y palpitar varios acontecimientos que marcaron el devenir de ese espacio y la región.

Los Chapar, vascos franceses, tenían almacén, pulpería y posta en donde hoy es el pueblo, veinte años antes de la fundación del mismo. El 1º de Enero de 1872, la familia Chapar y sus empleados fueron asesinados por los seguidores del famoso Tata Dios. Un mestizo, traído del Norte argentino por la familia Gómez, para curar la cefalea de la Señora de este terrateniente. Atendía en un rancho, en la propia estancia “La Argentina” y decía tener el don de curar; además, arengaba al gauchaje con un discurso xenofóbico y mesiánico. Lo que llevo a estos, en la madrugada del nuevo año, a comenzar una serie de asesinatos entre la población inmigrante. Finalmente, fueron sujetados y el Tata Dios tomado preso, considerándoselo el autor intelectual de los hechos. Muere, misteriosamente, en la cárcel.

La Historia de la fundación del pueblo, se inicia en 1889, al habilitarse la extensión del ramal ferroviario Las Flores – Tandil. Un hacendado del lugar, Victorio De la Canal dona las tierras para la instalación de una Estación Ferroviaria. En 1891 comienza a funcionar el tren; en pleno auge del modelo agroexportador, la parada allí favoreció a los productores del lugar. Al punto que en algunas épocas, salían dos veces por semana, producción agrícola-ganadera para Buenos Aires.

Supo ser muy próspero y con el tiempo se sumaron tres almacenes, farmacia, peluquería, escuela, sastrería, establecimientos lácteos. Por ejemplo la firma Magnasco tenía una de sus fábricas allí. Y es en lo que queda de ella, que se inició el recorrido por De la Canal. Se observa en el lugar: la vieja fábrica, las oficinas, la casa del encargado. Todo ello regado por el sinuoso y frondoso arroyo Langueyú. Se prosiguió por la calle principal, a cuyos lados se encuentran viejos ranchos de barro, el Club Defensores de De la Canal, con su cancha de futbol, la vieja panadería, algunas casas de época en estilo neoitalianizantes, la Estación de FFCC (el tren aún para), la casa del Jefe de Estación, la Capilla, y el Almacén de Ramos Generales de la familia Lasarte.

La familia Lasarte, descendientes de vascos, cuentan con un Almacén de Ramos Generales donde aún las compras se conjugan con una copa, un truco y el pool. Son el corazón del pueblo, allí los parroquianos tienen una parada obligada. El lugar se llenó, los dueños de casa obsequiaron a los visitantes una deliciosa picada, jugosas empanadas y ricos pasteles ¡más que felices!

Se finalizo la jornada, visitando el establecimiento “Lácteos La Juanita”. Con visita a la quesería, casa principal y lugar de ventas, todo coronado con un precioso parque verde, y guiados por la familia Miqueo.

Fue una visita única en muchos sentidos: recorrer e imaginar la madrugada del 1º de Enero de 1872. Observar como los cambios económicos y sociales influyen en la Historia de estos pueblos. “La Juanita”, conjuga una vieja actividad humana con lo nuevo en tecnología, ciencia y mercado.

Un grupo numeroso, que se destaco por la alegría y buena predisposición para CONOCER nuestra Historia.