Un hogar fue denunciado por cremar a un paciente sin dar aviso sus familiares. El extraño caso, que terminó en manos de la Justicia, se dio en la localidad mendocina de Guaymallén y, según trascendió, las autoridades del establecimiento contactaron a los allegados del fallecido, les dijeron que había muerto y en ese mismo momento les entregaron sus cenizas.

"Me dijeron que murió de un ACV (accidente cerebro vascular) y de un paro cardiorrespiratorio, después me entregaron sus cenizas en una cajita". Las increíbles palabras son de Orlando Medina, hermano de José Gabriel Medina –de 44 años-, el paciente que vivía en el Hogar del Sol dependiente de la cartera de Desarrollo Social.

Según contó Medina, su hermano sufría de epilepsia y, por pertenecer a una familia numerosa y de bajos recursos, permaneció prácticamente toda su vida en dependencias del actual Ministerio de Desarrollo Social. Además contó que el paciente necesitaba cuidado especial las 24 horas y que el último encuentro que tuvieron fue para su cumpleaños, el pasado 9 de julio.

Por su parte, el dueño del hogar, Alejandro Pérez, señaló que "hubo abandono de persona". Y expresó que desde que José Medina llevaba internado en este lugar nunca se presentó ningún familiar a verlo.

Pérez reveló que el paciente murió el sábado 12 de septiembre y que, como no tenía los medios económicos para conservarlo en una cámara hasta que algún familiar apareciera, se asesoró con una cochería y le dijeron que lo mejor era cremarlo.