Vecinos y comerciantes de avenida Buzón y Belgrano aseguran que se ven damnificados por la lentitud con la que avanza la obra de repavimentación impulsada por el Municipio.

Los comerciantes fueron quienes se mostraron más preocupados ya que, sumado a la crisis económica que atraviesan todos los sectores, la merma en las ventas se ve incrementada por la suciedad y las dificultades para circular que genera la obra.

Aseguran que los trabajos van “muy lento” y que hubo como 10 días que la obra estuvo paralizada. Explicaron que en el contexto de crisis económica esta situación agrava la baja en las ventas. Uno de los comerciantes indicó que en su caso la merma en las operaciones es de más del 50 por ciento. Piden que se agilice la obra.

“Hace 25 días cortaron y solamente 10 días habrán trabajado. Es muy crítica la situación ya que la economía del país no ayuda y la tardanza de la obra empeora todo”, explicó uno de los comerciantes. A esto se suma que durante más de 10 días la obra estuvo paralizada por completo, y cuando lo hacen sólo es de tarde y durante un par de horas, con lo cual todo se vuelve demasiado lento. 

Los vecinos y comerciantes no dudan que la obra favorecerá al barrio, pero el problema es que para repavimentar una calle, el Municipio no puede tardar tantos días. 

"El tema es que se nubla y ya no trabajan, vienen tarde, paran para comer, lo que está bien, pero al rato ya cortan. No habrán trabajado ni cuatro días seguidos desde que empezaron”, cuestionó un vecino. 

Foto El Eco de Tandil