Además del hábito de pasar tiempo con amigos, hay un gran valor en la calidad de ese momento. Es por eso que han regresado costumbres como los juegos de mesa, que permiten que reuniones pequeñas resulten un plan ideal y entretenido.

Aquí, te damos algunas ideas para compartir en grupos pequeños, con la compañía de una cerveza, que te asegurarán una velada de risas y entretenimiento.

Sushi Go!

Se trata de un juego muy entretenido y de movimientos rápidos, muy fácil de entender y participar. Liviano e ideal para una junta improvisada que permita capear el cansancio de la semana: tener a mano este juego y pedir en cervecería Patagonia es sinónimo de buen plan.

El juego de estrategia consiste en tratar de armar el mejor menú que, claro, debe ganar en puntaje, sumando el que cada carta contiene. Es para rondas de 3 a 5 personas y se juega muy rápido, ya que pasadas tres rondas ya hay un ganador.

Tabú

Sin dudas, es un juego para poner en acción la creatividad y las experiencias compartidas. Para sumar puntos, cada jugador, por turno, debe lograr que su equipo adivine las palabras de sus tarjetas, pero en su definición no debe emitir ninguna palabra prohibida.

Se toma el tiempo y el equipo que más tarjetas adivinadas suma es el ganador. Para aquellos que lo juegan con frecuencia, contiene un dado que añade ciertas complejidades y cambios en el juego.

Además, cada tarjeta contiene 4 palabras a definir, que pueden variar en cada ocasión. Un dato: usar ejemplos de la vida cotidiana funciona muy bien.

Uno

Otro juego rápido y fácil de ejecutar, ideal para una juntada entretenida, es el Uno. Es un juego de cartas pensado para rondas de 2 a 10 jugadores, que requiere de cierta estrategia. Para comenzar, se reparten 7 tarjetas por persona y el resto se coloca en una pila. Atendiendo a los números, colores y especificaciones de las cartas, se van arrojando según la que queda en el mazo y tomando más si nos lo ordena una jugada hábil de un compañero.

El objetivo es no quedarse con ninguna carta en la mano.

No lo testeamos ni un poco

Quizás, se trata del juego más acertado a la hora de tomar una cerveza con amigos, ya que tiene una variedad de actividades que despiertan la risa en todo momento. Se juega con cartas que guardan una serie de instrucciones y desafíos que los participantes deben seguir.

Algunas consignas condicionan la jugada completa, otras, una ronda y, muchas de ellas, accionan duelos entre dos jugadores. Es un juego de eliminación rápida y el objetivo es mantenerse dentro de él, aunque muchas veces eso lo deciden las cartas y no la estrategia.