Sin embargo, además de felicidad y aires de cambio, las mudanzas traen largas jornadas de embalado y desembalado. Esto significa cansancio y una inversión considerable de tiempo y también de esfuerzo, tanto de quien se muda como de quienes lo ayudan a hacerlo. 

Aunque muchas personas deciden contratar una empresa que provea servicios de mudanza para llevar a cabo cada uno de los pasos que componen este proceso, hay quienes prefieren realizar todo por su cuenta.

Si este es tu caso, te contamos lo que debes tener en cuenta al momento de planificar y organizar tu próxima mudanza.

¿Vas a mudarte? Recomendaciones para que tu cambio de domicilio sea un éxito

Dejanos adivinar. Estás a punto de mudarte y no contrataste ni una sola de las tantas empresas de mudanza disponibles en el mercado. ¡No te preocupes! Estos tips te ayudarán a cambiar de residencia de manera fácil y exitosa.

Empezá con tiempo

O sea, no dejes absolutamente todo para último momento. Lo mejor es arrancar a planificar con al menos 45 días de anticipación. ¿Pensás que es demasiado? Cuando veas la cantidad de cosas que tenés que guardar seguramente te parecerá poco.

Comenzá embalando todo aquello que no estés utilizando en ese momento. Por ejemplo, si es verano, guardá la ropa de invierno. Si es época invernal, embalá todos los artículos veraniegos, como lonas, sombrillas, sillas de playa, entre otros.

Conseguí las cajas adecuadas

¿Qué queremos decir con adecuadas? Pues que no sean excesivamente grandes ni tampoco super pequeñas. En las cajas muy chicas no te entrarán demasiados artículos, pero en las que son enormes tenderás a poner muchas cosas y luego tendrás dificultad para transportarlas y/o levantarlas.

Por eso, siempre priorizá cajas medianas que estén en buen estado, o sea, que no tengan rajaduras ni posean lados rotos. Otra opción son las cajas de plástico. Si las tienes, usalas sin inconvenientes.

Embalá por habitaciones

Este consejo cuenta con dos fundamentos. En primer lugar, si vas guardando artículos de acuerdo a su ubicación, será mucho más fácil guardarlos en tu nueva casa ya que sabrás que las cajas contienen cosas que solo van en la sala, por ejemplo, y no tendrás que recorrer toda la casa para almacenarlas. 

Por otro lado, el concluir con un ambiente te da la idea de que estás progresando en la mudanza, evitando la desmotivación.

Quitá el polvillo de los objetos antes de guardarlos

Si embalás artículos con polvo, vas a llevar la suciedad a tu nuevo hogar. De modo que antes de guardar libros, adornos, cuadros y cualquier objeto en las cajas, pasales un trapo para que queden bien limpios y no tener doble trabajo al llegar.

Embalá los artículos frágiles por separado

Vasos, platos, elementos de cerámica o porcelana. Todos los objetos frágiles tienen que estar embalados de manera individual para evitar que se rocen entre sí y se quiebren o se casquen. Lo mejor es usar plástico con globitos ya que amortigua los golpes, pero si no tenés este insumo a mano, envolvelos en papel de diario.